sábado, 31 de julio de 2010

POSTCARDS DE NY...(y 10)

Y para acabar las entregas neoyorquinas, esta miscelànea de postales de la ciudad que no duerme, con la recomendación de que la visitéis. A mí personalmente me ha encantado. Me ha parecido muy cinematográfica. Y ya sabéis que a mí el cine... me pirra.
New York y sus puestos de comida a cada paso.Nueva York y sus personajesNueva York y sus escaparates en la 5ª
New York y sus escuderías policiales.
New York y su multiculturalidad manifiesta.
Nueva York y su vértigo asegurado
New York y su halo cinematográfico.
New York y sus palomas estratosféricas
New York y sus bancos con placas dedicadas.
New York y sus garitos de todo tipo...
Nos ha encantado visitar Nueva York.

jueves, 29 de julio de 2010

WALKING (NY 9)


Walking. Edificios de cristal que parecen diamantes gigantes. One way. Una rubia como la de Sexo en Nueva York. 5th Avenue. La sintonía de "El golpe" sonando en un móvil. Walking. Ruido. Asiáticos. Un vestido de noche pero es de día. 43th Street. Tráfico. Un botella de agua en la mano. Blancos. Un móbil en la mano. Un perrito caliente en la mano. Ruido. Walking. Sirena de policía. Camisa blanca y corbata. Zapatos de Prada. Mujer anuncio. Afroamericanos. Sirena de bomberos. 2nd Avenue. Hispanos. Barras y estrellas. Otro móvil. Neones gigantes. Y otro móvil. Y otro. Walking. Semáforo. Cabello azul. Sombrerito vintage. Móvil. Paraguas para el sol. East 96 Street. Walking always...

"ESTAS BOTAS ESTÁN HECHAS PARA CAMINAR"

martes, 27 de julio de 2010

TURISTING (NY 8)

El turista es lo que tiene... Que turistea!!

"Tu vuo fa l'americano", vaya!!

lunes, 26 de julio de 2010

BUEN CALZADO... INDISPENSABLE! ( NY 7)

En Nueva York hay que ponerse las pilas de buena mañana...
Y un BUEN CALZADO!
En este post explicaré uno de nuestros apretados días en NY.
Preparados... Listos.... YA!
Primero desayunar mientras Gabriel, de Honduras, te explica el chiste del
día:Va un zorro neoyorquino corriendo y choca con un perro hondureño y le dice:-"Ai am sorry"
Y el perro hondureño le contesta:
-"Ai am perry!"
Para empezar el día no está mal,je,je.
Para
continuar... el Subway de New York, las calderas del subsuelo. Se deben rozar los 40 grados Celsius. En Farenhait como los cuentan ellos, un montón más, 104 más o menos.El Metro es toda una experiencia: también es exactamente igual que en las películas. Esas estaciones oscuras, antiguas, con todas las instalaciones al aire, con gente de todos los colores... pero con unos vagones frescos, nuevos y rapidísimos que te llevan veloces a la otra punta de Manhattan, con más facilidad y frecuencia de norte a sur que de este a oeste.
Nuestra parada será Canal St. Nada más bajar, los rótulos en chino te anuncian dónde estás: un barrio activo, ruidoso y vibrante. Chinatown.Al pasear por el Chinatown neoyorkino no he podido por menos que pensar que su homólogo de Londres es de juguete. Las dimensiones de este barrio bullicioso son enormes, y cada vez mayores porque la voracidad china se comió prácticamente a Little Italy dejándolo cercado y reducido a unas cuantas calles llenas de banderas, restaurantes italianos y guirnaldas callejeras. La decoración de las calles y un café de verdad en el Café "La Bella Ferrara", rodeados de fotos de famosos que han frecuentado el local, nos transportan por un momento al carácter italiano.Pero por poco tiempo, porque en cuestión de tres o cuatro calles, las típicas casas de pocas plantas con escaleras de incendios se llenan otra vez de caligrafía china que vende incluso lo invendible. Se llena sin remisión de las tiendas de milcosas, de las hierbas chinas y de los puestos de hermosas y exóticas frutas, y los farolillos y los restaurantes con fotos de noodles invaden de nuevo el escenario, en un caos y un alboroto frenético.
Llevamos desde las 9:30 caminando, pero aún queda mucho por ver. Salimos de Chinatown y vamos bajando por West Broadway. Una gran zona cercada y llena de grúas nos recuerda dónde estuvieron las Torres Gemelas. En la Zona Cero hay gente que se gana la vida intentando venderte un librito con fotografías del infausto día. Hay gente para todo(!). Ese día, los trabajadores que construyen la sede del nuevo World Trade Center -que prevé seis torres, una de ellas 124 metros más alta que las Torres Gemelas-, acababan de descubrir los restos de una embarcación hundida al parecer el siglo XVIII. Mientras, como cada día, multitud de gente peregrinaba hasta el memorial construído en memoria de las víctimas del peor desastre de la ciudad de New York.Nos alejamos de la Zona Cero y nos vamos acercando al distrito financiero. Muchas camisas blancas, muchas corbatas, colas en los puestos de perritos calientes para una comida rápida... Ahí cerca, Wall Sreet. Es la hora de comer. Casi todos los sitios que encontramos son tipo franquicia de ensaladas, bocadillos y cubiertos y platos de plástico. (Aquí lo del menaje de usar y tirar es una forma de vida. Ni me imagino la cantidad de plástico y papel que se desecha a diario sólo con eso). Además... no te dan cerveza, ni nada de grado. Debe ser para que el índice Dow Jones no caiga por motivos etílicos. Coke, si quieres, sí... en vasos industriales con una cantidad de hielo que parece que te has ido a beberla a la Antártida. En fin... Comemos, o lo que sea. Y ya estamos dispuestos para proseguir.
Estamos cerca de Battery Park, un gran parque frente a la bahía de Nueva York, y precisamente desde allí, desde el White Hall Terminal salen los ferrys gratuitos a Staten Island que nos permitiran hacer un agradable paseo. El perfil de Manhattan es impresionante y enseguida podemos divisar otro de los iconos de la ciudad: la Estatua de la Libertad, regalo de Francia a los Estados Unidos, inaugurada en 1886 y que desde entonces "ilumina al mundo". Bien, no es cierto, pero Miss Liberty es preciosa.
El paseo también es precioso. Una vez en Staten Island, el truco es coger enseguida el ferry en sentido contrario que te retorna a Manhattan. A la vuelta nos quedamos un rato en la parte cubierta del ferry para ver el ambiente de los neoyorquinos que ya han visto mil veces el panorama y que pasan del alboroto turístico de cubierta. Bajamos del ferry y saliendo por Battery Park nos acercamos hasta la parada de metro. Allá se localiza el Museo Nacional de los Indios Americanos emplazado precisamente -que también es ironía-, en el lugar donde el governador Stuyvesant compró la isla a los indios."Continuamos para bingo". No pares, sigue, sigue...
El metro nos deja en la parada de Lexington con la 51, localización ideal para darte una vuelta por la Fifth Avenue y emular a Audrey Hepburn delante del escaparate de Tiffanys. Pero aún queda una última batalla: Darnos una vuelta por la NBA Store y dar un vistazo a la Nike Town
- ir con un adolescente deportista a New York tiene sus servidumbres. Así que nos armamos de valor y adentro!Después del apretado día y de tantos kilómetros, ha idocayendo la noche sobre Manhattan . Nos hemos ganado una cena reparadora en el Dos Caminos, un mejicano con ambiente "sofis" en la 2ª Avenida y donde nos ponemos a gusto de guacamole, quesadillas y fajitas acompañado todo de buen vino.
El calzado ha aguantado. Y nosotros también. BONA NIT!!