viernes, 14 de diciembre de 2007

Los Monegros

1."Al pie de los Monegros, el sonido de las esquilas se confunde con los colores de la llanura, y no sabes si estás viendo o escuchando un rebaño. [....] Con los ojos entornados miro los horizontes. Todo parece flotar en espejismos. Hace calor y hace frío. Se oye el viento ... y yo lo escucho ... y me hace bien. Veo mucha tierra, y un resalte gris salpicado de romeros. Entre las piedras olvidadas, rodeado por estos horizontes secos y desolados, tan alejados y tan vacíos, y solo como estoy en mi debilidad, me siento viejo, como la tierra. Soy un personaje ancestral. El tiempo se detuvo aquí hace miles de años." Julio Villar (Viaje a pie, 1986)

2. Cada vez que paso por los Monegros quedo como hipnotizada. Echo la vista y allá se va, lejos, lejísimos, sin casi nada que la retenga, que la entretenga. Hay gente que desprecia el paisaje desértico de Los Monegros...¿Cómo no caen rendidos ante tanta luz, tanto aire, tanto cielo?

3."Los Monegros quieren ser líder turístico con el macrocasino. Los promotores dicen que la iniciativa será una mezcla de Las Vegas y Orlando con 32 hoteles casino y 5 parques temáticos.... Como todos los involucrados, Tayoun insistió en la vertiente educativa del proyecto. Juego y educación."El Periódico de Catalunya (13 de diciembre de 2007)

4. Es lo que siempre había soñado: perder los sestercios compulsivamente entre croupiers vestales en la zona de ROMA Y LOS CELTAS, mientras en el recreado mundo de espías de SPYLAND mi hijo experimenta la desazón de no conseguir recuperar el isótopo radioactivo que en manos perversas se cargará el mundo. Al salir, y de camino hacia las máquinas tragaperras localizadas en algún sarcófago del EGIPTO DE LOS FARAONES, los CSI Los Monegros velarán por los vaivenes de mi fortuna y la vista ya no se irá lejos, lejísimos, porque afortunadamente ahora chocará siempre con la inevitable TORRE DEL ÁGORA, faro consumista del complejo donde acabaré de gastarme los cuartos que me quedan. Por si no hubiera disfrutado bastante, siempre podré acabar jugando al golf. Cosa que en Los Monegros, ya tiene guasa.

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