martes, 15 de marzo de 2011

CÓRDOBA

Detalle de la fachada exterior de la Mezquita de Córdoba
Córdoba estaba llamada a ocupar un lugar relevante en la historia. Como provincia romana ya llegó a emular a Roma, pero fue después, con la entrada de los árabes, cuando Córdoba llegó a ser la ciudad más grande del mundo, la más culta,  la más próspera, la más elegante, llegando a albergar a más de medio millón de habitantes y donde convivieron  en cierta armonía judíos, cristianos y musulmanes, siempre bajo la cultura árabe dominante, todo hay que decirlo. Su esplendor califal convirtió a la sofisticada y mestiza Córdoba,  en una referencia para el mundo, con sus patios, bibliotecas, escuelas, fuentes, zocos y callejones que se abrían a palacios. El pensamiento cordobés ya había iluminado al mundo con Séneca y más tarde la sabiduría de Maimónides y Averroes atravesaría las fronteras.
ffssssssss.....PUM!

Pues en Córdoba hemos estado unos días, paseando por los hermosos y apacibles barrios de La Judería y La Ajarquía, tomando tapitas en sus plazas recoletas, maravillándonos con la Mezquita, imaginando la Córdoba de los Omeyas y disfrutando de ese Patrimonio de la Humanidad.


Además del recuerdo omnipresente de la Córdoba antigua, está la Córdoba actual, la  que conserva urbanismo de otros tiempos con calles comerciales bien llenas de gente,  la que acoge con sus tapas, y medias raciones y raciones enteras a los que se paran en sus tabernas, la que escancia una copa entera cuando pides un "medio de vino" y sin embargo sirve la mitad cuando pides una copa, la que te "achucha" en lugar de empujarte, la que se da "jartás " de comer, la que llama "vargas" al tintico de verano,  la que le echa "riles" cuando hay que echarle huevos a algo, o la que hace de su frase "Ozú, qué caló" el lema de una camiseta turística.


En Córdoba, las calles de La Judería saben de horas y relojes.  Saben que hay horas repletas de visitantes, que miran, admiran, compran,  hablan, escuchan, retratan, van en fila... Y horas de silencio, de recogimiento, en las que realmente parece que estás en otra época. Nos alojábamos en ella, y por la noche, la calma y el silencio era un tesoro para nuestros oídos.
 En Córdoba hay que admirar el precioso bosque de columnas y el hermoso invento del doble arco de herradura y de medio punto de La Mezquita, pero también los tesoros de esa catedral injertada en ella, -que la desvirtuó haciéndole perder perspectiva, acústica y luz, pero que posiblemente también la salvó.

En Córdoba hay que visitar el Real Alcázar, y la casa andalusí, y la sinagoga, y la casa Sefarad, y Medina Azahara...



Plaza de la Corredera, la única plaza cuadrada de Andalucía
Casco Antiguo
Pero también hay que reservar tiempo para darse una vuelta por la Plaza Tendillas y la Plaza Corredera y tomarle el pulso a la Córdoba actual; y por supuesto para probar el salmorejo, y el rabo de toro, y las berenjenas fritas y el moriles .  Tabernas no faltan,  muchas y buenas:  El Churrasco, Casa Salinas, Casa Pepe...Lástima no tener tiempo para todas!
Y aquí abajo, unas cuantas fotos más
Córdoba... Ozú qué bonita!!

6 comentarios:

Josep Maria dijo...

una estada molt ben aprofitada i un relat magnífic.

Anónimo dijo...

Els relats de la Carmen són de "mestra", que te'ls fa agradar i et manté encuriosida fins al final. Per cert, no surtiu en cap de les fotos!on esteu?
Mercè de la Cala

Pepa dijo...

Ozú!!! Qué recuerdos!! Cuanto de bonito en una ciudad tan pequeña...
Pero al hilo del comentario de mi prima...no solo no salís vosotros en las fotos...tampoco los paraguas!!! Que creo que vino y cañas no os han faltado pero agua, tampoco. Besitos.

Carmen Cortés dijo...

Gràcies, Josep Mª!! Per textos ben fets, els teus!

Gràcies Mercè!! Sí que tenim fotos on surtim, sí, però les he deixat per a la següent entrada que faré un recull de "turistas turisteando", jeje

Gracias Pepa!! Es recogida y bonita, sí señora. Por cierto, los paraguas saldrán más en la entrada de Sevilla, porque ya se sabe... que... la lluvia en Sevilla es una maravilla (Y un jamón)

Besos a los tres!

Pilar dijo...

Ozú que bonitas fotos!

Carmen Cortés dijo...

GRaciah zaleroza!