jueves, 29 de mayo de 2008

TELÉFONOS

“No puedo estar sin ti, amor. Te esperaré en el Truman a las 6:30. Un beso. Ernesto.”
Marta leyó tres veces el mensaje del móvil. Luego cerró los ojos y susurró: Ernesto. Lo conoció en la cena que organizaba anualmente la empresa donde trabajaba su marido. Aquella vez esa horrorosa cena de hermandad fue mucho más llevadera gracias a Ernesto. Daniel ya le había hablado de él en varias ocasiones poniéndolo por las nubes. Estuvieron conversando toda la noche. Comentaron el panorama político, hablaron de cine y de libros, y Marta quedó gratamente impresionada cuando él le adivinó con admirable tino sus gustos musicales y culinarios. Desde aquel día nada fue igual. Se vieron muchas más veces y a Marta se la llevó la pasión, la espera, el placer. No dijo nada a su marido, pero estaba convencida de que él lo notaba. Le sentía distante, evasivo, preocupado. Daniel pasaba ahora mucho tiempo en el trabajo. Además últimamente se veía obligado a hacer muchos viajes con Ernesto, y Marta temblaba pensando que en uno de aquellos viajes de empresa acabaría descubriéndolo todo. No puedo estar sin ti, amor, leyó otra vez en el móvil. Ahora hacía dos semanas que lo habían dejado y Marta estaba destrozada, no sabía qué hacer con ese guiñapo de corazón que le había quedado. Volvió a leer el mensaje y decidió ir a la cita. El Truman. Nunca habían ido al Truman. Se informó de la dirección exacta y se dirigió hacia allí. El Truman no era lo que esperaba, la verdad, cuando entró le pareció tremendamente oscuro. Pero la barra estaba bien iluminada, así que se acercó y pidió un JB con hielo. El camarero, un chico alto y bronceado le sirvió atentamente y Marta fue acostumbrándose poco a poco a la luz del local. Vio en la oscuridad una pareja besándose. Dos chicos jóvenes y atléticos estaban de pie en la barra y charlaban cariñosamente. Un bar de ambiente, pensó: -Ernesto extrema las precauciones. Mientras esperaba decidió poner en orden su bolso. Sacó la bolsita de los cosméticos, la agenda y el paquete de kleenex. Y al sacar el móvil, Marta se estremeció. Porque sólo entonces se dio cuenta de que el móvil que llevaba,exactamente igual que el suyo, era el de su marido.
Y después de esta historieta, y como ya habéis visto que hoy la cosa va de teléfonos, aquí os pongo un pequeño vídeo que he hecho con fotos telefónicas, para que si os apetece juguéis a ver cuántas películas de las que salen habéis visto, o a imaginar qué se dicen por teléfono los protagonistas... mientras oís a la gran Aretha Franklin cantando "Call Me".



Dedicado especialmente a estas dos guapas mozas que cumplen años:

MOLTES FELICITATS DOLORS I MIREIA!!!





9 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Vaya, vaya, con el Danielito!
Los móviles siempre diferentes, por si acaso, je,je.
Oye, me ha gustado muuucho el vídeo de los teléfonos. Me lo voy a descargar, claro.
Feliz fin de semana y descansa, guapa.
Pilar

Manu dijo...

El que también era un krack con el teléfono en la mano era Gila. Entrañable, inteligente, corrosivo, marginal, ocurrente, iconoclasta y un montón más de adjetivos.

Feliz fin de semana para todos los bloggers de este magnífico rincón.

PS.- Apoyo la idea de hacer un día un encuentro de bloggers para una comidita, cenita o lo que se tercie.

Besitos

rosa rebull dijo...

A mi esto que le pasa a la chica nunca me va a pasar Roberto no tiene movil. Buen fin de semana, esperemos que sin lluvia. Yo tambien me apunto a la reunion de bloggers. Besos

Anónimo dijo...

Hola a tod@s!! Pues nos apuntamos!!Para viaje de empresa el que me he hecho yo al Valle de Jerte, a un hotel llamado "El túnel del Hada" altamente recomendable. Estaba superhechapolvo del fin de semana y del trabajo en sí, y se me ocurrió ir al SPA a darme un masaje "Apacible Paraíso, con pintas vedas a la esencia de cardamomo, arroz y loto..." Salí de allá catatónica perdida, como si me hubieran metido un chute de algo.Me fui hacia el restaurante y una vez allá según Ana, la farmacéutica, sólo le sonreía al camarero pidiéndole revuelto de morcillas y piñones y patatas revolconas,(Buenísimas) que debía pensar que conmigo tenía filón. Me hicieron un vídeo y todo y ni a tomar copa me fui después, directamente al hotel. ¿Qué te parece? Si queréis os doy el TELÉFONO.
Muchos besos!!

Carmen Cortés dijo...

Ole, tata, a qué hotelitos te vas con la empresa!! Que he entrado en la página y he flipado... (Hadas no he visto, pero cuidao que igual hay algún sátiro, je, je!!)Muà
Un listo, el Danielito, Pilar, un listo, y seguro que se le marcaban tós los abdominales! Besicos.
Rosa: Roberto sin ordenador, Roberto sin móvil...¿Es de este mundo ese novio tuyo?jajaaa (Bueno, sí que lo es, que los modernos aparaticos escanciadores de cerveza sí que le van, jejje, Besos a los dos)
Manu, tus aportaciones se convierten en colaboración ipso facto. Has visto? Muchas gracias.Muà.
A ver si miramos nuestras agendas, bloggers!

dolors dijo...

Moltes gràcies Carmen.
Molt bona idea això de la dedicatòria. Si que m'agrado a la foto, clar que si la fas tu no pot fallar i a sobre estic ben acompanyada. Preciós el video dels telèfons, m'encanten les pel·lis antigues i el Cary Grant, el millor (que vellaaaaa que em faig)
Un petó
Fins dilluns
Dolors

Anónimo dijo...

Me gustó tu post. ¡Mucha suerte!

Anónimo dijo...

Avui post telefònic, que no "poste telefónico", jajaaja, què graciosa que estic, uf!
M'agrada molt aquest vincle que vas posant de fotografies. Per cert, he vist una pel·li que penso que t'agradaria,"La antena": bonica fotografia en blanc i negre, una mica peculiar, però bé.
Petonets

Carmen Cortés dijo...

Hola, Dolors! Com no has de sortir bé amb lo maca que ets!!
Que celebris bé l'aniversari per les terres de Ponent i petons també per la Magda i la teva família!!
Muchas gracias, anónimo(!?)
Montse, una companya també m'ha comentat això d'aquesta pel·lícula. Serà qüestió de veure-la. Muà